ARTEMISA
La Artemisa, Artemisia vulgaris, también como hierba de San Juan, es una planta vivaz originaria de Europa y Asia perteneciente a la familia de las Asteraceae que puede llegar a alcanzar los dos metros de altura. Podemos disfrutar de sus flores, que crecen en racimos, durante el verano. Esta hierba medicinal está considerada como una de las primeras que fueron usadas por el hombre. En la medicina popular tradicional se usan las flores, los tallos y las hojas.
Propiedades medicinales.
Esta planta medicinal posee aceites esenciales, colina, taninos, mucílagos, resinas, que le confieren acción analgésica, antiparasitaria, anticonvulsiva, antiséptica, emoliente, antibacteriana, antiinflamatoria, calmante, emenagoga, tónica, estimulante y aperitiva.
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Está indicada para los resfriados y gripes
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Combate la retención de líquidos
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Facilita las digestiones lentas y pesadas
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Mejora las bronquitis
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Se usa para el estrés y la fatiga física y psíquica
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Provoca y regula la menstruación y reduce los dolores
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Corta las hemorragias nasales
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Estimula la función de los riñones
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Fortalece la matriz
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Se usa para casos de depresión leve
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Ayuda a depurar el hígado
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Mejora los cólicos
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Combate las infecciones
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Ayuda a eliminar los parásitos
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Purifica la sangre y facilita la eliminación de toxinas
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Alivia los vértigos y mareos
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No está recomendada durante el embarazo o lactancia
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No se recomienda tomar durante más de dos semanas seguidas
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Remedios Caseros.
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Preparándola en infusión, 1 cucharadita por taza de agua, podremos combatir las indigestiones, dolores menstruales, las gripes o la retención de líquidos.
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La infusión de la planta también se usa para limpiar, desinfectar y calmar heridas y llagas
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Para provocar la menstruación se prepara un emplasto y se pone debajo del ombligo
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Para aliviar dolores musculares se dan masajes con el aceite infusionado en esta planta, lo preparas como se indica aquí
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También podemos preparar tintura de esta planta para tenerla siempre disponible.
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Cultivo y Cuidados.
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Esta planta de porte herbáceo necesita luz directa, así que reserva un lugar luminoso para ella.
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En cuanto a riegos, no es una planta exigente, evita los encharcamientos y asegúrate de que la tierra drena el agua correctamente.
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Es capaz de resistir sequías y heladas.
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Crece bien en suelos con pH neutro, arenosos y arcillosos.
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La debemos abonar en primavera
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Si la cuidas bien, tienes planta para 30 años
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