Sal y Azúcar.
Hace muchos años que circula la información relativa a los “enemigos blancos” que nos conviene evitar, recordamos que se trata de la Sal, Azúcar, Harina, Leche y Arroz blanco o refinado.
En esta ocasión nos gustaría tratar el tema de la Sal y el Azúcar.
Ambos, se utilizan mucho para la preservación de los alimentos desde tiempos remotos, y se encuentran casi en toda la comida que ingerimos.
Sal.
La mayoría de los mexicanos consumimos demasiada sal. Se recomienda un máximo diario de 2,300 miligramos de Sodio, pero si tienes 51 años o más o tienes hipertensión, diabetes o insuficiencia renal crónica, tu límite es 1,500 miligramos.
“La sal se encuentra en los alimentos, por ejemplo una manzana fresca contienen 5 miligramos de sal pero una rebanada de pastel de manzana tienen 500 miligramos, una carne de ave de 225 gramos contienen 300 miligramos, pero tres piezas de pollo asado tienen 5,600 miligramos.”
Debemos de tener cuidado con la comida chatarra que está llena de esta sal refinada que aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, consumir este tipo de sal equivale entre 8 y 20 veces más que la que debiera comer.
Con la finalidad de que el sodio y el potasio encuentren un equilibrio, se debe consumir unos 1,500 miligramos por día.
“¿Es conveniente añadir yodo o flúor a la sal? Hay que tener siempre presente que, tanto el déficit como el exceso de cualquier nutriente constituye un riesgo para la salud, y el yodo y el flúor no son una excepción. En el caso del flúor hay que ser especialmente precavido, ya que el margen entre beneficio y toxicidad es muy estrecho.”
Viendo que “prácticamente todo tiene sal” no hay una razón para añadirle sal extra a las comidas. Así que la recomendación de los expertos en nutrición es no tener el salero en la mesa.
La otra opción que recomiendan es la sal de mar o sal del Himalaya.
Azúcar.
El azúcar se conforma de glucosa y fructuosa. El problema es la manera en que la consumimos, porque las frutas y verduras, por sí mismas, ya contienen azúcar. Las azúcares refinadas son causantes de obesidad, de un desequilibrio nutritivo que provoca alteraciones metabólicas, hiperacidez, caries y riesgo de diabetes mellitus en niños y más.
La recomendación de consumo de 50 g/día es la que establece la Organización Mundial de la Salud (OMS), que en años recientes emitió la siguiente nota de prensa: "La actual recomendación de la OMS, que data de 2002, es que el consumo de azúcares debe representar menos del 10% de la ingesta calórica total diaria, [unos 50 gramos de azúcar al día]. En el nuevo proyecto de directrices se formula la misma recomendación, pero además se indica que si la ingesta calórica total diaria se reduce a menos del 5% se obtendrán beneficios adicionales. Un 5% de la ingesta calórica total equivale a unos 25 gramos (aproximadamente 6 cucharadas de café) de azúcar al día para un adulto con un índice de masa corporal normal".
Según esta recomendación, deberíamos consumir menos de 18 kg de azúcar al año, aunque sería preferible reducir esta cantidad a 9 kg de azúcar al año.
México se encuentra en el tercer lugar en el consumo de azúcar per cápita con 38 kilogramos de azúcar, equivalente a tomar dos refrescos y medio diarios. Más de 4 veces la recomendación “preferible”.
El azúcar tiene un consumo directo (el azúcar que añadimos al café, a las “aguas de fruta”, etc.), y otro tipo de consumo vía el “azúcar añadido” que se encuentra principalmente refrescos (23,0%); yogures, leches fermentadas y postres lácteos (22,3%); pastelería, bollería y galletas (16,9%); zumos y néctares de frutas industrializados (11,9%) y chocolates y alimentos a base de chocolate (11,4%).
De manera que, amén de disminuir los productos de “azúcar añadido” se recomienda ampliamente disminuir el azúcar de consumo directo ya que es lo que se encuentra fácilmente en nuestras manos con algo de voluntad y disciplina para cambiar algunas costumbres.
Las otras opciones disponibles son utilizar la miel de abeja vírgen, la miel de agave, o la stevia. Que son naturales y sin afectar a la salud. Prohibido el aspartame que se encuentra en la mayoría de los endulzantes comerciales, llamados Nutrasweet, Splenda, etc.
Conclusión.
La alimentación es un tema sumamente diverso. No existe una manera unificada en el mundo para la comida del ser humano. Depende tanto de la disponibilidad como de la cultura. Se suele hacer “tendencia” a igualar las ciudades occidentales por ejemplo y ni así existen normas o indicaciones tomadas como correctas a la hora de nutrirse.
Las Dietas para bajar de peso suele ser un tema que está, literal, sobre la mesa; sabemos que existen muchos enfoques para intentar llegar a determinadas metas ya que existe el interés de saber si habrá una manera de alimentarse bien.
Crecemos con algo de información acerca de calorías, carbohidratos, vegetales, proteínas, grasas buenas y malas, comida chatarra, comer con horario, comer a deshoras, comida natural, etc. Una gran cantidad de personas podemos darnos cuenta de lo procesado e industrializado que se encuentran nuestros alimentos, atisbamos su relación con los problemas de salud y sobrepeso, y la sal y el azúcar en exceso están relacionados.
Referencias.
http://www.lavidalucida.com/los-5-venenos-blancos-que-consumes.html
https://www.vitonica.com.mx/hidratos/mexico-ocupa-el-tercer-lugar-en-consumo-de-azucar-a-nivel-mundial
https://www.vitonica.com/alimentos-funcionales/algunos-conservadores-naturales-de-los-alimentos
https://www.taringa.net/post/salud-bienestar/15720853/Los-Cuatro-Venenos-Blancos.html
http://www.creadess.org/index.php/informate/desarrollo-humano1/nutricion-salud-y-estetica/37862-el-mito-de-los-cinco-venenos-blancos-ii-el-azucar
http://comobajardepesoya.com/la-dieta-de-la-zona-y-la-recomendacion-diaria/
